LA LEYENDA DE CHRISTIAN CHRISTIANSEN

La leyenda de Christian Christiansen, “El Pescador”[I]


La historia de Christian, en este Claromecó mágico y misterioso como todo pueblo que crece junto al mar, llega a nuestros oídos por el relato de habitantes antiguos, y luego se transformará en leyenda. Todos recuerdan a Christian. Algunos vagamente, pues muy pocos lo conocieron en profundidad. Por esa razón, el Museo Regional de Claromecó se abocó a la tarea de recopilar datos, detalles, anécdotas de este personaje solitario y sensible. De ello surgen relatos asombrosos, tiernos y hasta poéticos de este controvertido vecino. Una muestra de la ternura que escondía en su alma insondable está en el hecho de que, a pesar de la precariedad en la cual vivía y quizá privándose aún más de lo poco que poseía, compró y donó a la Escuela Nº 11 de Claromecó un Proyector de Diapositivas. Por ese acto se puede deducir que era un hombre culto. De no ser así, poco podía interesarle la educación o el desarrollo intelectual de los niños. En la carta que se transcribe en forma textual, los alumnos de la Escuela agradecen su generosa acción:

“Christian:
Mis compañeros me han designado para decirle cuanto le agradecemos todos el cariño que siempre nos ha demostrado. Gracias a su generosa iniciativa, la Escuela cuenta hoy con un magnífico proyector que hará más amenas e instructivas las lecciones que diariamente nos imparten nuestras maestras. Bien sabemos que usted actuó espontáneamente, sin esperar recompensas, pero nosotros, al hacerle entrega de este cuchillo, que le ayudará en sus quehaceres, estamos en cierta forma con usted, diciéndole que los alumnos de la Escuela Nº 11 le estamos muy agradecidos y le deseamos buena suerte”.

Su arribo a Claromecó y su forma de vida


El registro de personas extranjeras donde figura su nombre completo dice: Juan Christian Christiansen, de nacionalidad dinamarquesa, con domicilio en Claromecó, fue emitido en el año de 1944 y firma solamente Juan Christian.
En el año 1954 se tramita su Cédula de Identidad donde firma Juan Christiansen; en este certificado hay una fotografía en la que se ve a un hombre de facciones regulares y armónicas, con ojos claros y pequeño bigote. Aparenta tener alrededor de 40 años de edad.
En ninguno de estos documentos figura su fecha de nacimiento. El modo en que vivió es conocido por los mayores del pueblo: “Cuenta Christian que estando en Buenos Aires cayó prisionero en el año 1919 por cuestiones políticas y embarcado con otros presidiarios hacia el sur. Cuando el barco navegaba cerca de la costa se arrojó al mar y llegó nadando a nuestras playas. Hizo su rancho a algunos kilómetros de Claromecó frente al mar. Trabajó en lanchas pesqueras y fue guardavidas. Se dedicaba a pescar con red y vendía el producto en el pueblo. Siempre le seguían 3 o 4 perros, que utilizaba para cazar liebres a las que cuereaba para vender el cuero y usar la carne como alimento”.
Ya viejo, dejó su rancho en la playa y se radicó en Dunamar, ganándose la vida fijando médanos y cazando nutrias. Christian murió en el Asilo de Ancianos de Tres Arroyos, donde fue internado por su precario estado de salud en el año 1965, por la familia Olsen, que se ocupó de su situación.
¡Cómo habrá extrañado su mar en sus últimos días porque no pudo verlo ni oírlo!
Lo dice el poema que le dedica Carlos Bancur, su vecino y amigo, quien lo evoca con sencillas palabras pero con profunda emoción.

A CHRISTIAN, EL PESCADOR
(Carlos Bancur)


Con su ranchito en médano
en medio de pampa y mar,

tomando mate tranquilo

y lo vi al viejo Christian.

Era de pocas palabras
sabe Dios qué pena arrastraba.

Sus ojos lo decían todo,

la amargura lo embargaba.

Pasión llevaba en su alma

por el mar.
Relámpagos de horizonte en su mirar

y en las noches oscuras,

tendiendo las redes

el viejo Christian.

Te fuiste muy triste del pago querido

a tus ojos ya ciegos

el llanto llegó

allá, en la ciudad, termina tu vida,

pero aquí, en las playas,

tu alma quedó.

Gracias “Comisión de apoyo al Museo Regional Aníbal A. Paz”.

[I] Tomado de la “Guía Claromecó, 2004”; publicación municipal, libre y gratuita. Para más información sobre Christian Madsen: http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=816761